
La industria alimentaria es responsable de aproximadamente el 70% del consumo mundial de agua, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Además, para 2050, se estima que la demanda de este recurso en la producción de alimentos será tres veces mayor a la actual. Estos elevados porcentajes resaltan la necesidad de implementar cambios hacia prácticas sostenibles que optimicen el uso de un recurso tan vital.
Ante este desafío, diversas empresas han intensificado sus acciones para mitigar su impacto en el medioambiente, adoptando nuevas tecnologías para reducir el consumo de recursos hídricos en sus operaciones. Una de estas empresas es Tetra Pak, encargada de brindar soluciones de procesamiento y envasado de alimentos, que mediante sistemas de recuperación de recurso hídrico prevé ahorrar a nivel global 400 toneladas por día, el equivalente a una piscina olímpica por semana.
La experiencia de la compañía es parte de una tendencia creciente en el sector, donde la innovación y la responsabilidad ambiental se han convertido en pilares para enfrentar los grandes retos hídricos. En este contexto, Tetra Pak comparte tres estrategias que están transformando la industria en el Perú.
Usar estaciones de filtrado: En muchas zonas, el acceso al agua es limitado, por lo que minimizar su uso es clave. Con el uso de las estaciones de filtrado se pueden recuperar hasta 5500 litros de agua por cada hora de operación, eliminando impurezas y contaminantes. Este proceso tecnológico, además de reducir el desperdicio de agua, permite su reutilización en la misma planta de producción, asegurando un uso más eficiente del recurso.
Modernizar equipos de procesamiento y envasado: La limpieza y desinfección representan entre el 95% y 99% del agua utilizada en una planta de producción. Una gestión ineficiente eleva los costos operativos y afecta la rentabilidad y calidad de los productos. Para optimizar este proceso, Tetra Pak ha desarrollado líneas de procesamiento que utilizan luz UV y filtración en lugar de pasteurización, permitiendo reducir el consumo de agua hasta en un 50% y el uso de energía en un 67%, en comparación con equipos convencionales. A esto se suma la ventaja de minimizar las emisiones totales de gases de efecto invernadero en un 20% y la reducción del 30% de la pérdida de producto.
Analizar puntos de datos: A través del análisis de datos operativos, las empresas pueden detectar fugas, evaluar el rendimiento de sus equipos y optimizar sus procesos sin necesidad de realizar grandes inversiones. Al acceder y utilizar esta información de manera efectiva, se puede mejorar la eficiencia en las operaciones y reducir el desperdicio de agua. De esta manera, los productores pueden identificar y visualizar los datos de forma clara, permitiéndoles realizar diagnósticos de procesos con facilidad, tomar decisiones más informadas y aprovechar al máximo la capacidad de su infraestructura actual.