
La evolución de la logística en el Perú ha sido marcada por el creciente desafío, especialmente en términos de eficiencia operativa y reducción de la dependencia de la mano de obra, como viene sucediendo con otras actividades en el mundo. Si antes la automatización era vista como un factor diferencial, hoy se ha convertido en una necesidad crítica para la competitividad y expansión de las empresas.
Según el Centro Nacional de Planeamiento Estratégico (Ceplan), se prevé que el crecimiento del comercio electrónico en el Perú alcance ventas por 205 millones de dólares para 2028, lo que supone un reto logístico para empresas y operadores.
Las actividades que antes dependían exclusivamente del trabajo humano, como la manipulación de paquetes en centros de distribución, ahora pueden ser realizadas por robots. Un claro ejemplo es la innovación conocida como Smart Item Robotics (SIR) de la empresa holandesa Vanderlande, un sistema de picking robótico que utiliza pinzas inteligentes, visión artificial y control mediante inteligencia artificial, operando las 24 horas del día.
“Marcas grandes en el Perú están incentivando el crecimiento de sus plataformas digitales e incrementando la demanda de los centros de distribución. En ese mismo punto, las empresas de logística han comenzado a invertir en soluciones automatizadas para mejorar tiempos de entrega y reducir errores en la clasificación de productos”, sostiene Javier Mercado, country manager de Vanderlande Perú.
Además de la clasificación de paquetes, otras soluciones robóticas están revolucionando la logística. Pallet AV es un sistema de vehículos autónomos diseñados para el transporte de palets dentro de los almacenes. Utilizando una combinación de carretillas elevadoras autónomas (AF) y robots móviles autónomos (AMR), esta tecnología permite mover cargas de diferentes tamaños y pesos de manera eficiente, reduciendo costos operativos y mejorando la seguridad en el almacén.