Según Ipsos Global Advisor (2023), el Perú figura como el tercer país a nivel mundial con mayor espíritu emprendedor, con más de cinco millones de personas que apuestan por iniciar sus propios negocios. Esta situación resalta no solo la actitud proactiva de los peruanos ante los desafíos económicos, sino también su disposición para asumir riesgos y generar nuevas oportunidades laborales.
En este contexto, el emprendimiento se consolida como una habilidad clave para el desarrollo personal y profesional, lo que impulsa la necesidad de fomentar este espíritu desde la etapa escolar. Según Juan José Torre, asesor del Área de Ciencias Sociales del Colegio de la Inmaculada, inculcar una mentalidad emprendedora en los estudiantes permite formar ciudadanos con iniciativa, resilientes y autónomos, con un sentido de responsabilidad social, capaces de enfrentar un mundo cada vez más competitivo.
En línea con esta visión, este centro educativo ha implementado un innovador Plan de Negocios dentro de su área de Ciencias Sociales, que forma parte de la competencia de gestión de recursos económicos. Este programa permite a los estudiantes conocer acerca de conceptos tecnológicos, financieros y de gestión, aplicables a diversas profesiones y áreas de negocio. “El objetivo es proporcionar a los jóvenes una experiencia práctica en la generación de microempresas, poniendo en desarrollo habilidades como el trabajo en equipo, la perseverancia, la responsabilidad y la creatividad”, explicó Torre.
En lo que va del año la institución ha permitido, a través de su “Feria de Emprendedores”, que más de 100 estudiantes creen sus propias microempresas y comercialicen más de un centenar de productos como ropa deportiva, peluches, llaveros, gorros, medias, bufandas, tomatodos, entre otros, con la marca CI, fomentando la identificación con el colegio y permitiendo aplicar sus conocimientos y desarrollar habilidades interpersonales y empresariales.