La Cámara de Comercio Brasil – Perú (Cambraper) llevó a cabo su cuarta reunión virtual, evidenciando el firme compromiso de fortalecer las relaciones comerciales entre ambos países. El encuentro, que contó con la participación de más de 70 representantes diplomáticos y empresariales, puso de relieve la importancia estratégica de la alianza económica bilateral.
Con un enfoque centrado en el panorama actual de inversiones y comercio, se exploraron nuevas oportunidades y se abordaron desafíos clave para impulsar aún más la colaboración entre Brasil y Perú, considerando a este último como un socio estratégico de gran relevancia en la región.
Entre los participantes destacaron João Ijino, jefe del Departamento de Promoción Comercial, Atracción de Inversiones y Turismo de la Embajada de Brasil en Lima, y Renata Manzatto Baldin Pinheiro Alves, abogada especializada en Riesgos y Compliance.
Durante el encuentro se destacó la ejecución de diversas actividades en colaboración con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) y Promperú, con el objetivo de incrementar el flujo de importaciones brasileñas hacia el mercado peruano. Asimismo, se resaltó el énfasis del gobierno brasileño en la integración regional, lo cual se refleja en la implementación del “Proyecto Rutas de Integración Regional Sudamericana”, con especial atención en el proyecto Chancay, que podría tener un impacto significativo en las importaciones brasileñas y promover la discusión de agendas de proyectos bilaterales de integración.
En este sentido, se discutió cómo Chancay podría beneficiar la producción brasileña y convertirse en una alternativa para las exportaciones hacia el Pacífico. Asimismo, se retomó la idea del tren transoceánico, considerando la posibilidad de que Perú sea una ruta para las exportaciones brasileñas hacia los mercados asiáticos.
“En el desafiante panorama de integración entre Brasil y Perú, surge la necesidad de optimizar la infraestructura terrestre para impulsar el flujo comercial bilateral. Con un preocupante 74% de las exportaciones brasileñas hacia Perú realizadas vía marítima, y apenas un 19% a través de la carretera interoceánica, la situación se torna más crítica en el lado peruano, donde el 92% de las exportaciones que ingresan a Brasil provienen del mar, relegando un escaso 2,3% por vía terrestre”, sostuvo João Ijino.
Agregó que este escenario presenta un reto clave: revitalizar la utilización eficiente de la carretera transoceánica, reduciendo así los costos adicionales que enfrentan los exportadores brasileños. No obstante, la complejidad se intensifica con la limitación de cupos para transportistas, generando una demanda excesiva y dificultando la obtención de autorizaciones.
Estos obstáculos representan un verdadero desafío para el dinamismo del comercio bilateral, subrayando la urgencia de abordar las barreras logísticas para impulsar una integración más fluida y rentable entre ambos países.
En cuanto a la inversión, según el Ministerio de Comercio de Brasil (Midic), Perú ocupa el puesto 26 como inversionista externo directo en Brasil. Sin embargo, datos de Proinversión indican que Brasil se encuentra en el puesto siete como inversor en Perú.
Actualmente, el stock de inversión supera los 2000 millones de dólares, concentrándose principalmente en el sector minero, seguido de industria, servicios, construcción, energía, petróleo, agricultura, comercio, financiero y transporte.