El Instituto Peruano de Economía (IPE) rebajó la proyección del crecimiento económico para este año. Así, se profundiza la caída estimada para este 2023 de -0,3% a -0,6%. Esto implica el peor resultado desde 1990, sin contar el año de la pandemia.
El escenario económico para 2024 tampoco es auspicioso, pues las perspectivas también se deterioran y se prevé un rebote de tan solo 1,9% y ya no de 2,1%.
El recorte del crecimiento económico para este año responde a que el consumo privado ha sido menor a lo esperado, mientras que la recuperación de la confianza es más gradual.
En tanto, para 2024 el IPE advierte que existen riesgos que podrían impactar al dinamismo económico, como El Niño. Por otro lado está el factor empleo, pues el continuo retroceso de la actividad económica ha provocado una significativa debilidad del mercado laboral. Entre enero y setiembre de este año hay una caída de 4,7% en el área rural y un descenso de 5% en el sector agro.