Alcanzar el tablero para girar una perilla o tocar un botón suena algo fácil, pero para los ingenieros requiere de una atención extrema a los detalles. Es por esto que, al desarrollar el totalmente nuevo crossover eléctrico Nissan Ariya, sus diseñadores e ingenieros no solo consideraron la ergonomía involucrada para llegar al tablero, sino que estaban decididos en crear una nueva apariencia para los controles tradicionales. Esto requirió repensar el espacio de la cabina, el tacto y el posicionamiento.
Es así que el interior del Ariya fue diseñado para ser una cabina espaciosa y abierta que ofrece una sensación de calma y serenidad, siendo parte de un tablero sin botones tradicionales. La elegante moldura de madera veteada que divide el tablero cobra vida al encender el Ariya, iluminando un conjunto de controles ambientales que se encuentran justo debajo de la superficie del tablero. Utilizando una nueva generación de controles de retroalimentación háptica, estos botones sutilmente integrados abren un mundo de posibilidades en la relación entre función y diseño.