El impacto y los efectos de la Covid-19 siguen causando estragos en todos los niveles sociales, económicos, políticos y, especialmente, de salud en la población. Actualmente, a nivel global ya son más de seis millones de personas infectadas con el virus y los gobiernos vienen implementando diversas medidas para contrarrestar la crisis generada por la pandemia.
Las industrias que representan un aporte fundamental para el crecimiento y sostenimiento de los países se han visto paralizadas o reestructuradas en sus procesos operativos y funcionales. Aquí, el empresariado de la gran, mediana, pequeña y micro empresa ha tenido que ajustar drásticamente sus proyecciones para el presente año. Entre estas medidas se considera al talento y el impacto en su estabilidad laboral.
Según la reciente Encuesta de Expectativas de Empleo de ManpowerGroup, los empleadores de la región Sudamérica, entre ellos Perú, Colombia, Argentina y Brasil, reportan intenciones sombrías de contratación para los próximos meses de julio, agosto y setiembre del 2020.
En el caso de Perú, la investigación presenta una expectativa neta de empleo de -19%, una cifra histórica negativa en 12 años de realizada la encuesta y que, además, representa una disminución de 24 puntos porcentuales en comparación con el trimestre anterior, y de 32 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo del año pasado.