El presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Ricardo Márquez, señaló que la corrupción judicial tiene un costo para el Perú que podría superar los cuatro mil millones de soles, además que deteriora la competitividad y el desarrollo del país.
Explicó que para esta estimación, la Gerencia de Políticas Públicas de la SNI planteó que si de todos los factores que inciden en la producción nacional solo mejoramos el sistema de justicia, alcanzando el estándar ético del Poder Judicial de Chile (el país menos corrupto de la Alianza del Pacífico, según el Foro Económico Mundial), el valor de nuestro PBI sería de cuatro mil millones de soles más que el actual.
Vale recordar que el sistema judicial peruano es percibido como uno de los cinco más corruptos de Sudamérica; por eso las últimas medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo, a fin de establecer una lucha frontal contra la corrupción, son una iniciativa que debe ser apoyada por todos los actores políticos y sociales del país, destacó el empresario.
“La corrupción es especialmente nociva para el crecimiento económico porque desalienta la inversión, al dañar la predictibilidad del sistema jurídico y, de esta forma, hace más riesgosos y menos productivos los emprendimientos empresariales. Además, reduce la creación de empleo porque genera incertidumbre jurídica, inestabilidad política e inseguridad pública”, manifestó Ricardo Márquez.